PIENSE Y HÁGASE RICO- NAPOLEÓN HILL [AUDIOLIBRO] [ONLINE]

PIENSE Y HÁGASE RICO - NAPOLEÓN HILL

¿Suena fácil, no es así? Tal vez cuando lees el título de este libro puedas creer que es una locura esto de hacerse rico con el pensamiento; sin embargo, aunque ciertamente no es como arte de magia, la verdad es que este factor es quizás el más importante para tener éxito y Napoleón Hill, el autor, no sólo te explica cómo hacerlo sino que te muestra con hechos, con casos de la vida real.

Esta obra fue escrita en 1937, una época muy distinta a la nuestra. A pesar de esto, las enseñanzas y los métodos descritos en ella han trascendido generaciones y han sido caracterizados como los más efectivos para hacer dinero hasta la fecha. Las cifras hablan por sí solas: de acuerdo con la Fundación Napoleón Hill, más de 100 millones de copias han sido vendidas y ha sido traducido en más de 40 idiomas, convirtiéndolo en el libro de autoayuda más leído de todos los tiempos.

¿Qué tiene de especial “Piense y hágase rico”?

Desde que estamos pequeños, muchos soñamos con ser alguien importante en la vida: empresario, doctor, bombero, presidente, maestro, millonario, etc. Pero aún de grandes muchos no saben cómo lograrlo o están estancados en un aspecto de sus vidas que les impide alcanzar el éxito. Piense y hágase rico es de esos libros que logran cambiar tu forma de ver y hacer las cosas para que puedas conseguir lo que anhelas con fuerza, orienta tu mente hacia el triunfo y la fe en ti mismo.

Su particularidad es que Napoleón Hill, periodista, escritor, profesor y vendedor, cuenta que tuvo la valiosa oportunidad de entrevistar a Andrew Carnegie, el hombre más rico del mundo en esos tiempos y el segundo hombre más rico en la historia de la humanidad luego de Rockefeller.

En este encuentro, Carnegie le confesó a Hill el secreto para hacer dinero y le afirmó que este secreto es identificable o se puede encontrar en todas las personas exitosas para elaborar una especie de fórmula. El mismo Carnegie le preguntó a Hill si estaría dispuesto a pasar veinte años de su vida o más investigando al respecto para “ofrecérselo al mundo”, a lo que Hill respondió afirmativamente y llevó la tarea a cabo entrevistando a más de 500 personas ricas de origen variopinto, es decir, de todo tipo de clase social, las cuales también le revelaron sus secretos de éxito.

Según Hill, entre los hombres que han aplicado esta fórmula se encuentran algunos tan reconocidos como Henry Ford, fundador de Ford Motor Company; John D. Rockefeller, fundador de Standard Oil Company; Theodore Roosevelt, expresidente de los Estados Unidos, Thomas A. Edison, el inventor más importante de los Estados Unidos; Charles M. Schwab, magnate de la industria del acero; Wilbur Wright, pionero de la aviación; George Eastman, fundador de Kodak y muchos más. Todo esto sin incluir a aquellos empresarios e individuos exitosos que se han sentido inspirados por este libro y, en consecuencia, han llevado a cabo estos métodos para conseguir una fortuna.

Con las historias de estos y más hombres, Napoleón ilustra al lector los pasos hacia la riqueza, los cuales se resumen en 13:

1- El deseo

2- La fe

3- La autosugestión

4- El conocimiento especializado

5- La imaginación

6- La planificación organizada

7- La decisión

8- La perseverancia

9- El poder del trabajo en equipo

10- El misterio de la trasmutación del sexo

11- El subconsciente

12- El cerebro

13- El sexto sentido

La intención de estos pasos es que el lector aprenda a tener la mentalidad adecuada para recibir la riqueza, pues como dice Hill, la fórmula sólo funciona para aquel que esté preparado para ella.

El “deseo ardiente”

A lo largo del libro, especialmente en el primer capítulo, se habla de lo necesario que es que los individuos cuenten con un deseo ardiente para lograr el éxito. Uno de los ejemplos del autor es el caso de Edwin C. Barnes, que con un origen humilde y sin poder pagar un pasaje en tren, pensaba y deseaba fervientemente ser socio de Thomas Edison.

El autor indica que la mayoría de la gente se hubiese detenido ahí y se hubiese resignado a las circunstancias, pero Barnes no. Como pudo, llegó a la oficina de Edison y le indicó que iba a hacer negocios con él. A Edison le había parecido todo un vagabundo, sin embargo, la expresión de Barnes le transmitía que estaba dispuesto a hacer lo que fuera para lograr su objetivo, por lo que terminó ofreciéndole un trabajo mal pagado.

Los meses pasaron hasta que la oportunidad al fin llegó: Edison había creado una máquina de dictar, sin embargo, sus vendedores no querían comerciarla porque requería demasiado esfuerzo. Barnes aprovechó esto y le dijo a Edison que él sí podía venderla y así fue. De hecho, tuvo tanto éxito que Edison terminó por darle un contrato para venderla en todo el país. Finalmente, Barnes se había hecho socio y millonario, pero mejor aún: demostró que pensar sí puede hacerte rico.

Claro que no sólo el desear o pensar algo es lo único que se requiere para que puedas generar una fortuna, pero es el primer escalón y a lo largo de la obra podrás conocer los demás pasos a través de anécdotas (no queremos spoilearte mucho) , donde aprenderás a educar tu mente por medio de la autogestión, para que ésta pueda estar enfocada en lo que quieres; podrás ganar confianza en ti mismo, así como materializar tus más fuertes pensamientos sin importar tu nivel académico.

Que, por cierto, esto puede aplicarse a cualquier cosa que decidas alcanzar, no necesariamente ser millonario. La riqueza puede no significar lo mismo para todos, pero en todo sentido no es fácil conseguirla y la fórmula presentada por estas personalidades exitosas son adaptables a lo que deseas independientemente de su naturaleza.

¿Quiénes deberían leer este libro?

El libro está pensado para todo aquel que tenga un objetivo concreto que lograr e incluso para los que necesiten inspiración. A todos ellos se les presenta como un manual que no sólo va a aportarles técnicas y métodos para alcanzar la meta máxima, sino que también los ayudará a sentirse motivados, a pensar como los millonarios lo hacen porque, al fin y al cabo, las lecciones de más de 500 personas exitosas y ricas están plasmadas en sus páginas. Definitivamente, es un libro que deben leer absolutamente todos los emprendedores y las personas que desean triunfar en los negocios, no importa su tipo. Eso sí, sabiendo que la fórmula que se plantea toma tiempo asimilarla en nuestras vidas, ya que, después de todo, cambiar hábitos negativos o muy arraigados no se hace de la noche a la mañana.

Algunas enseñanzas valiosas de “Piense y hágase rico”

Para mostrarte un poco más sobre la esencia de este libro, decidimos dejarte tan sólo algunas de sus frases más interesantes para que puedas reflexionar al respecto:

- Una de las causas más comunes del fracaso es el hábito de abandonar cuando uno se ve presa de una frustración temporal.

- Las batallas de la vida no siempre favorecen al hombre más fuerte o más rápido, pero tarde que temprano el hombre que gana es aquel que PIENSA QUE PUEDE.

- Todos los hombres han llegado a ser lo que son gracias a sus pensamientos y sus deseos dominantes.

- Cada persona que vence debe estar dispuesta a quemar sus naves y eliminar todas las posibilidades de dar marcha atrás. Solo así puede tener la seguridad de mantener ese estado mental conocido como un deseo ardiente de ganar, esencial para el éxito.

- No se requiere más esfuerzo para apuntar algo en la vida, para reclamar abundancia y prosperidad, del que hace falta para aceptar la miseria y la pobreza.

- No hay limitaciones para la mente excepto las que aceptamos.

- El conocimiento es solo poder en potencia. Únicamente se convierte en poder si está organizado en planes definidos de acción y dirigido hacia un objetivo determinado

- Los que abandonan nunca ganan, y un ganador nunca abandona.

- El dinero, que es esencial para la conducción de un negocio, resulta tan valioso como un montón de arena si no se combina con un cerebro eficiente.

- Las riquezas no responden a los deseos, solo a planes definidos, apoyados por deseos concretos, alcanzados a través de una constante perseverancia.